Autor
Yani Marisol Quevedo Donis
Resumen
Este artículo presenta los hallazgos del estudio enfocado a identificar y describir la respuesta estatal ante las demandas de la población adulta mayor debido a que se constituye uno de los sectores más vulnerables en Guatemala, al tener menor acceso al trabajo y a un ingreso adecuado que incida en su calidad de vida de manera positiva. La tercera edad sitúa al adulto mayor en una parte del ciclo de vida donde se manifiestan más las carencias derivadas de la insatisfacción de las necesidades humanas auténticas como el afecto, el abrigo, el ser, el estar, el tener, el hacer, la protección y la alimentación. Los actores y el papel del proceso estudiado fueron tres: adultos mayores, familia y el Estado guatemalteco, debido a que se considera que los adultos mayores deben tener garantizados los derechos humanos y específicamente los derechos económicos, sociales, culturales y políticos, así como los derechos singulares de la vejez. Son seres con dignidad y sujetos de derechos que deben ser incluidos en los beneficios sociales y en la creación de condiciones de igualdad y equidad desde las políticas públicas a través de las distintas instituciones que velan por el cumplimiento de los derechos humanos de los adultos mayores. En Guatemala la gran mayoría de adultos mayores no disponen de ingresos suficientes, pensiones o apoyo familiar, por lo que sufren una serie de carencias y problemas que los ponen en desventaja y prácticamente les excluyen de los planes de cobertura de los servicios de salud, a pesar de los esfuerzos significativos de las instituciones sociales, en la actualidad no se dispone de los servicios básicos que atiendan sus necesidades. Cuando se incremente la población en ese estrato, la problemática puede agudizarse mucho más y la población demandará mejores condiciones de vida
Palabras clave
Adulto mayor familia, derechos humanos, Estado, respuesta institucional